Marie Claire Italy 2010.
Hace relativamente poco visualizaba la última colección de Prada para subsanar ciertas visiones o herejías estéticas. Ahora estoy perdida entre tanta saturación de clones, rayas y colores. La calle parece un cubo de Rubik resuelto, en el cual se ha cambiado el rojo por el rosa flúor.
Motel Rock Summer 2011.
Me dan ganas de ponerme luto por esa colección, fantástica e imitada hasta la saciedad, de Jil Sander a la que casi empiezo a coger mania gracias a las tiendas que nutren sus propuestas a menores precios.
Gucci.
El furor de esos verdes y naranjas de Gucci combinados con morado, color de la penitencia, la que estamos pagando ahora.
Ni siquiera hay la mínima motivación por ejercitar la mente y jugar con el cubo.
Veo carne de lookbooks por todas partes que se copian al detalle y a esa copia de la copia lo llaman streetstyle porque dan el pego.
En fin! Me voy al wardrobe a por un total black y respirar en HC.
Le estoy cogiendo mucha manía al rosa fluor y mira que antes me gustaba ... El morado nazareno siempre me ha chiflado.
ResponderEliminarSaludos!=)
Y pensar que me hizo salir un poco del negro y ahora ya me cansa. El penitente es maravilloso, si señor.
ResponderEliminarGracias por pasarte!