No se si es por el encanto de las casas recargadas de las abuelas, una cierta nostalgia, que me gusten los gatos o la edición italiana.
La cosa es que hoy prefiero excesos, dejar por un momento el falso minimalismo de lado o esa obsesión por estar a la última que salta, hablar de lo de ahora, adelantar lo de mañana.
Me he ido a un pasado reciente, a aquellos caprichos de la moda de hace unos años, lleno de detalles, colores, contrastes y papeles de pared imposibles que me fascinan de repente, mañana se me pasará.
Adoro a mi gata y las situaciones surrealistas.
No se si el ver lo importante que es comparar a dos señoras de la realeza europea y sus estilismos clónicos me ha dejado tan revuelta que mi cuerpo pedió regresión.
Puede que me haya sentido reflejada con el momento me rodeo de ratas de peluche de Ikea y finjo "muerte por ratas".
Lo que si se, es que la escena de la bañera ha sido clave, es lo que tiene un fetiche, y se ha superado con el gato con gafas.
Inevitable ha sido recordar las palabras jocosas de una amiga:
"Yo terminaré sola y rodeada de gatos". Jajaja.
Va por ti, nena.
Maravilloso Miles, sin escatimar en detalles.
Siri Tollerod in "The Vagaries of fashion"
bu Miles Aldridge
fot Vogue Italia in 2008.