jueves, 16 de junio de 2011

Total black bath

Alejen de mi esos colorines, esos estampados animales que se venden como churros a menos de cinco euros por pieza. 
Aspiro a que un bikini me dure más de un baño, lo barato sale caro y se ve demasiado. 
No, no busco un flúor para que me haga más morena. 
No, no tengo nada que disimular. 
Quiero refrescarme en un fundido en negro, 
restregarme en la arena con oscuridad y alevosía. 
Vivir una fantasia opaca.
"Son más estéticos", "favorecen más"... 
Solo sirven para tomarte un gin tonic en la terraza en un ataque de delirios de grandeza acompañado de pamela y gafas de sol, para darle salida a ese bañador con el que te encaprichaste, que no se diga que no lo estrenaste. No escatimemos en detalles y combínalo con algún brazalete, de esos que NO se bajan a la playa. 
Half-kini y Olé!
Fantasearé con este momento fetiche de arnés y capa de gasa en movimiento... Con esto ya me tenian ganada, soy lo peor.


Marie Claire Spain Junio 2011



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